“! Oye, vas colgado, no jo… ¡”, le grita un conductor de bus a otro que va con rumbo al departamento de Masaya, en las inmediaciones de los semáforos del mercado Roberto Huembes de Managua, mientras otro bus de la misma ruta casi lo alcanza.
Y es que este tipo de fricción entre los transportistas cada días es más común, pues un conductor de una unidad que a diario viaja de Managua hacia los departamentos, comentó que esta situación en que a veces buses de la misma ruta vayan peleando pasajeros, es a raíz de que el Ministerio de Transporte e Infraestructura (MTI), ordenó quitar a los llamados “chequeadores”, los cuales tenían la función de medir el tiempo de recorrido por cada punto y garantizar la salida y llegada puntual a las terminales de las unidades de transporte, “pero al no haber supervisión de los chequeadores, todos los conductores andan haciendo el relajo, y esto perjudica a los transportistas porque otro conductor “vivo” se adelanta a su hora y se les lleva a los pasajeros que le correspondía”, comentó un ayudante de transporte.
“Chequeadores” se quedaron sin trabajo
Los quejosos, indicaron que todo este desorden se originó con las nuevas medidas que estableció la Policía de Tránsito en Nicaragua, en que indica que todo tipo de automotor no debe de exceder el límite de velocidad de 50 kilómetros por hora sobre las carreteras, por lo que la función de los llamados “chequeadores” ya no es necesario, sin embargo, esto también ocasionó la perdida de trabajo de miles de estos funcionarios en todo el territorio nacional.
De tal manera que los transportistas en Nicaragua han pedido al gobierno de Daniel Ortega, que revise muy bien esta medida porque se está generando el caos en la circulación del trasporte publico de Nicaragua, y que a la larga los grandes perdedores serán la misma población que usa a diario este tipo de servicio.